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miércoles, 21 de noviembre de 2007

cosas del buceo



ESTO ES UN FRAGMENTO DE MI DIARIO (...)

No podria describir todo lo que veo y siento bajo el agua, pienso que ni un prodigio de la literatura con su extenso vocabulario seria capaz de hacerlo; aun asi hare lo posible para plasmar el sin fin de pensamientos que afloran en mi mente cuando estoy explorando el mundo submarino.


Me fascina la ingravidez, flotar, estar rodeada por litros y litros de agua, salada, llena de vida, girar hacia cualquier lado, en todos los sentidos, me hace sentir como una pelota redonda que domina todos sus movimientos.




Cuando observo de cerca me emociono, veo mas colores de los que conozco, y menudos colores, no solo brillan, sino que ademas iluminan, estan encendidos, parecen fotoluminiscentes, como si cada pez estuviera electrificado, es una pasada. Tambien disfruto de mirar hacia el horizonte, ver bancos y bancos de peces, de todos los tamanos y formas, estan ordenados...de echo todo en el mar esta en orden, todos tienen su lugar, y si alguno se equivoca ya vendra otro a advertirle que ahi no puede estar. Creo que estos animales bailan en su habitat y cuando yo me sumerjo en su salon formo parte de su coreografia, aleteo alante, atras y al lado, me hundo y asciendo, lo hago todo coordinado!!



Otra de las cosas que pienso cuando estoy paseando por el oceano es en los olores, siempre he asociado al pescado con un olor fuerte, algo agrio (y desagradable), pero desde que conozco este paraiso mi concepto ha cambiado, tiene que oler bien, es todo tan perfecto que nada lo puede estropear.



Mientras aleteo y me deslizo por las capas de agua cruzo miradas con mucho crustaceos, peces y demas bichos, se que me miran, seguramente no soy la primera buceadora que ven (o igual si) y tampoco sere la ultima, pero ese instante de "intercambio" entre especies me hace sentir bien, son segundos intimos, solo nuestros. De alguna manera los comparto con el resto del grupo, nos miramos con complicidad atraves de nuestras gafas y creo que todos nos sentimos algo extranos ahi abajo, somos pequenos invasores/exploradores; esta sensacion no es negativa ya que se que estoy respetando el entorno, procuro no tocar ni molestar, asi no altero el baile que realizan.




Y como no voy a mencionar "el silencio", el intervalo de tiempo entre mi inspiracion y expiracion, son solo unos segundos, y realmente no es silencio, mas bien es la musica del mar, para mi es una suave percusion que como una orquesta llevan a cabo todos los animales marinos suena crujiente y de vez en cuando aplauden todos, crich crich, plas plas....me gusta, me relaja. Me recuerda al sonido de unas castanuelas o quizas unas maracas de semillas, o porque no, a los tacones de un bailaor de flamenco, pero no suena cerca, suena lejos....como si estuviera ensayando en un estudio y yo, lentamente apoyara mi oido sobre la puerta para escucharle atraves de la madera...asi es como suena el silencio del mar.